Todo niño para crecer sano y fuerte, necesita alimentarse con una dieta balenceada rica en vitaminas y minerales.
Pero hoy en día muchos tienen anemia, desnutrición y hasta mueren de hambre.
Hice esta reflexión con mis alumnos y les hacía ver que muchos llegan a tener anemia o desnutrición por razones de malos hábitos alimenticios, ya que preferieren bagatelas o chucherías ante la posibilidad de una alimentación saludable.
Ahora bien, entre los síntomas que siente una persona con anemia está el cansancio o agotamiento físico y mental, así como sueño constante y poco deseo de estar activo; lo anterior hace que el rendimiento académico sea bajo.
En la misma reflexión les hice una pregunta que incluía la parte espiritual ¿Qué alimenta tu alma?
Así como el cuerpo puede llegar a tener anemia y hasta desnutrición severa. El alma igual puede tener lo mismo.
Una anemia profunda, ya casi leucemia, esto por la basura con la que se le alimenta, la cual puede ser: la pornografía, las películas de violencia, la idolatría, el sexo ilícito, la mentira, los vicios, la crítica, malas conversaciones, celos y hasta odio entre otros.
Muchos experimentan cansancio y hasta hastío por la vida. Cristo vino a dar vida y vida en abundancia, una vida con propósitos. Así como la desnutrición y la anemia se erradican con una dieta saludable y rica en minerales como el hierro, también te presento una dieta saludable para tu alma:
1. pedir perdón a Cristo por tus pecados.
2. Lectura de la Palabra de Dios.
3. Oración diaria.
4. Reunirse con otros que edificarán tu vida.
5. Testificar sobre lo que Dios ha hecho en tí.
Sigue esta dieta espiritual y verás como la hemoglobina de tu alma empieza a subir y entonces tendrás defenzas que te harán fuerte para enfrentar cualquier situación y podrás estar activo, dando lo mejor de tí al cien por ciento. No te canses, ni te duermas. Alimentate de Cristo y dará vigor a tu vida.
¿Que dieta vas a seguir?...
