sábado, 14 de noviembre de 2009

DILE A TU ALMA QUE BENDIGA A DIOS TODOPODEROSO




103:1 Bendice, alma mía, a Jehová,
Y bendiga todo mi ser su santo nombre.
103:2 Bendice, alma mía, a Jehová,
Y no olvides ninguno de sus beneficios.
103:3 El es quien perdona todas tus iniquidades,
El que sana todas tus dolencias;
103:4 El que rescata del hoyo tu vida,
El que te corona de favores y misericordias;
103:5 El que sacia de bien tu boca
De modo que te rejuvenezcas como el águila. Salmo 103

Cada día que pasa es una nueva oportunidad para agradecer a Dios por sus misericordias, las cuales son nuevas cada mañana, su fidelidad es grande y nunca nos desampara por que es bueno con todos, él está pendiente de nuestras necesidades.

En el salmo 103 encontramos algunas de las cosas por las cuales debemos agradecer y bendecir a Dios con todo nuestro corazón:


1. Dios nos da muchos beneficio entre los cuales están: la familia, el trabajo, los hijos, la salud, los bienes materiales, nos ha dado la vida misma, la oportunidad de ser felices, debemos bendecirle por dibujar una sonrisa en nuestro rostro, por el amanecer que siempre trae esperanza, por los detalles de la vida, por los cumpleaños, entre muchas cosas más, que se pasan desapercibidos; pero que son parte de la provisión diaria de Dios.

2. Se debe bendecir a Dios por perdonar nuestros pecados.

3. Debemos bendecirle por sanar nuestras enfermedades.

4. Es necesario bendecirle, también por que nos rescata del fracaso, de la muerte y nos guarda del peligro.

5. bendigámosle por coronarnos de favores y misericordias cada día.

6. Por saciarnos con su Palabra.

7. Por que nos hace rejuvenecer como las águilas.

¿SABES POR QUÉ MÁS DEBEMOS BENDECIRLE?

Y ¿entonces por qué no bendices a Dios conmigo?, eleva una oración y dile a tu alma que bendiga a Dios todopoderoso.

Si en este momento estás cruzando situaciones difíciles, igual dile a tu alma que bendiga a Jesucristo, no pienses en las dificultades de la vida, piensa en los beneficios que Dios a diario te da.

Con amor para ti y para mí…